Mi Idea de Europa

Vaya, prometí que hoy hablaríamos del Gobierno. Bien, quien nos habló fue Felipe González en el Paraninfo de la Universitat de València -500 años de historia- sobre su idea de Europa, su último libro. "¿Cómo es posible que 500 millones de europeos no hayan sido capaces de inventar algo parecido a Google o a Facebook? Porque no hay una base para apoyar su talento". Aquí volveríamos al tema Merkel, a la economía productiva o al conocimiento tácito (know how) que conlleva la experiencia -tan poco apreciada en España-.

Felipe González estuvo cómodo hablando de Europa, de la crisis financiera mundial, de Maastritch y de la política monetaria. Temas todos ellos que, creo, sólo entendimos un pequeño grupo del numeroso público allí presente. "Demasiado técnico", decía un periodista a la salida de La Nau. Claro, era un marco universitario. El mítin lo dio una hora después en el pabellón deportivo de Burjassot. No obstante, mi compañera del máster, María Vega Sánchez, y yo disfrutamos de lo lindo.

Autocrítico, González recordó que la Unión Europea no ha cumplido con la Agenda de Lisboa, que en 2010 tenía que haber alcanzado sus objetivos: una economía altamente competitiva,  cohesión social y sostenibilidad medioambiental. "No nos lo tomamos en serio", añadió el ex presidente socialista. "Éste es el precio de la crisis: unas estructuras obsoletas y la inversión de la pirámide poblacional". Felipe González se erigió ayer en gurú cuando recordó un artículo suyo publicado en 2001 y titulado: "Los ahorros son virtuales y las deudas, reales". En realidad, el artículo lo firmó en 2002 bajo el título de: "Se olvidan las prioridades".

Y en verdad, fue un vaticinio: "Ahora se ve con más claridad que en este modelo de capitalismo popular tan pregonado, los ahorros son virtuales y se esfuman, mientras las deudas son tan reales como la vida misma - Se olvidan las prioridades · ELPAÍS.com -". Recordemos, octubre de 2002. González, rebelde sin causa, abogó por la Tasa Tobin, pero ya adelantó que el próximo G20 no lo iba a aprobar, que Sarkozy había hablado con Obama y no había nada que hacer. Recordemos, la Tasa Tobin es la de nuestro amigo Ignacio Ramonet. Para los profanos: es una tasa sobre todas las transacciones bancarias a nivel mundial, para frenar los movimientos especulativos de capital. González dio cifras: "El 92% de los movimientos de capital por el mundo se realizan en 72 horas máximo". 


El secreto está, pues, en la regulación. Pero, ¿cómo regular el sistema financiero global? Al menos, Europa tiene la respuesta: "Con las mismas reglas de funcionamiento en toda la Unión Europea para todos los bancos". Otro vaticinio: González apuntó a un informe de 1999,  previo al Tratado de Amsterdam, en el que anunciaba que "la política monetaria iba a reventar con la primera crisis financiera sin una política económica común", prevista, pero nunca aplicada. Apocalíptico, añadió que se está preparando la segunda crisis mundial. La solución, aquí: Get the Report: Conclusions : Financial Crisis Inquiry Commission. En resumen: la crisis se podía haber evitado. Mañana lo contaremos.